Variedades de cannabis médico – Capitulo 3

En1753, Carlos linneo clasificó el reino vegetal para el mundo occidental. En el proceso, Linneo clasificó y nombró el género y la especie Cannabis sativa. Concluyó que el género Cannabis sólo tenía una especie, sativa. Sin embargo, los viajes y las comunicaciones eran dificultosos en aquella época, y Linneo no tenía noticia del C. indica y el C. sativa.

Reino: Plantae—todas las plantas 
División: Magnoliopsida—clase magnolia 
Orden: Rosales—nueve familias 
Familia: Cannabaceae—familia del cáñamo, plantas de flor, alrededor de 170 especies en unos 11 géneros 
Género: Cannabis—tres especies 
Especie: indica, sativa y ruderalis
Variedades: número infinito de combinaciones

Variedades de cannabis médico

A continuación, se incluye una manera sencilla de recordar tres términos importantes que se emplean a menudo en este libro:

género = apellido 
especie = nombre 
variedad = apodo

Cualidades del cannabis 

1. Planta herbácea floreciente dioica anual 
2. Flores imperfectas (dioicas) = plantas macho y hembra + intersexuales (también llamadas hermafroditas) 
3. Produce cannabinoides que se concentran en tricomas glandulares, los cuales aparecen en el follaje, principalmente en los racimos florales 
4. Polinización aérea 5. Plantas de “día corto”, excepto el C. ruderalis; es posible que las variedades ecuatoriales sean autoflorecientes y, por tanto, de “día neutro”

Variedades de cannabis

Legalmente, todo el cannabis, ya sea soga o droga, está clasificado como Cannabis sativa (C. Sativa).* Con independencia de su origen, la ley internacional considera todo el cannabis como C. sativa. Sin embargo, según Hemp diseases and Pests, por el Dr. J. M. McPartland, R. C. Clarke y D. P. Watson, así como el organismo CAB International, el Cannabis sativa puede clasificarse, además, como: Cannabis sativa (= C. sativa var. sativa), Cannabis indica (= C. sativa var. indica), Cannabis ruderalis (= C. sativa var. spontanea), y Cannabis afghanica (= C. sativa var. afghanica). Cada variedad tiene su propio patrón de crecimiento, así como un aspecto distinto, olor y sabor peculiares, etc. En este libro, trato el C. afghanica como una subespecie del C. indica. Así es como lo clasifican la mayoría de criadores y cultivadores de cannabis.

Lo más frecuente es que el Cannabis sativa, el C. indica y el C. ruderalis estén cruzados unos con otros. Los criadores cruzan las “variedades” y seleccionan la descendencia en función de sus cualidades deseables. Consulta el capítulo 25, Crianza, para más información. 

Los jardineros de cannabis médico cultivan variedades con distintos perfiles de cannabinoides. El perfil de cannabinoides puede variar según la planta. Las variedades con niveles altos de THC y CBD son las que ofrecen el mayor valor terapéutico.

Las plantas de Cannabis sativa tienden a hacerse altas y a tener mucho espacio internodal, así como hojas de foliolos estrechos. Imagen de Mel Frank (MF).

El Cannabis indica es más bajo, tiene forma cónica y foliolos relativamente anchos.

El Cannabis ruderalis suele ser bajo y con pocas ramas. Florece después de 3-5 semanas de crecimiento sin importar el fotoperiodo.

Cannabis sativa

El Cannabis sativa (= C. sativa var. sativa) se originó predominantemente en los climas cálidos y tropicales de Asia, América y África. Cada región de origen tiene características específicas, pero todo el C. sativa tiene los siguientes rasgos generales: porte alto, a veces espigado, con más distancia internodal que el C. indica; un sistema de raíces ampliamente extendido, y hojas grandes de foliolos estrechos que tienden a mostrar tonos claros de verde; y flores un tanto escasas, especialmente cuando se cultivan en interior bajo lámparas o en condiciones de escasa luminosidad. Las flores femeninas aparecen primero en los nudos de las ramas y, normalmente, se desarrollan a lo largo del tallo y las ramas en vez de acumularse alrededor de los nudos. La formación de las flores es más lenta y menos densa que en el C. indica. Los cogollos florales del C. sativa permiten más circulación de aire y son menos susceptibles a los hongos.

‘Peyote Purple’, de CannaBioGen, es un buen ejemplo de que las hojas del C. indica también pueden ser estrechas.

En general, las variedades sativa florecen más tarde que las variedades indica. Si bien son buenas productoras al aire libre, y suelen llegar a medir 4,5 m o más, las variedades sativa puras alcanzan una altura excesiva demasiado deprisa para resultar prácticas en el cultivo de interior. Algunas variedades sativa superan los tres metros en sólo tres meses de cultivo. 

Las variedades sativa de África central, incluyendo la potente ‘congoleña’, crecen de manera similar a las colombianas, con una estatura que suele superar los 4,5 metros, ramas largas y cogollos poco apretados.

Sudáfrica tiene puertos importantes. Los marineros llevaron el C. sativa desde muchos lugares distintos y lo plantaron en Sudáfrica. Consecuentemente, la potencia de la hierba sudafricana puede ser muy fuerte o muy débil, y las plantas pueden ser bajas, altas, de ramas largas, arbustivas, etc. La famosa ‘Durban Poison’ produce potentes cogollos tempranos de color verde claro, y es la variedad más conocida de Sudáfrica.

El C. sativa asiático incluye las variedades tailandesas, vietnamitas, laosianas, camboyanas y nepalesas, y tiene características de crecimiento diversas, así como variaciones significativas en cuanto a potencia. Al mismo tiempo que las tailandesas y otras variedades sativa de la zona suelen ser superpotentes, también se cuentan entre las más lentas en madurar y las más difíciles de cultivar en interior. Las variedades tailandesas producen cogollos menudos y ligeros en ramas grandes y extensas tras florecer alrededor de cuatro meses. Las sativa tailandesas, vietnamitas, camboyanas y laosianas tienden a producir adultos hermafroditas.

‘Jamaican Grape’, de Next Generation Seeds, se hace bastante alta con distancias largas entre los nudos de las ramas.

Las semillas de esta planta tailandesa cultivada en 1976 procedían de un “Thai stick”, que consiste en cogollos atados alrededor de un tallo de bambú. (MF)

Esta planta autóctona del sur de la India formó parte de un programa de crianza iniciado por Mel Frank en 1977. (MF)

Las variedades sativa nepalesas pueden desarrollar hojas sobredimensionadas en plantas altas y espigadas que producen cogollos escasos y de floración tardía, pero otras variedades de esta región crecen como plantas bajas y compactas de floración más rápida. Con frecuencia, la producción de tetrahidrocannabinol (THC) y la potencia resultan bastante altas, pero también pueden ser mediocres.

El cáñamo industrial es C. sativa. Las variedades altas producen las fibras más largas para una amplia gama de usos industriales. El cáñamo, llamado cariñosamente “rope” (soga) en lengua inglesa, suele contener semillas, niveles extremadamente bajos de THC y, a menudo, niveles muy altos de CBD.

El C. sativa recreativo provoca un efecto típicamente energético, cerebral e inspirador, el cual es seguido por un deseo de comer (dulces en especial) que se conoce por la expresión en lengua inglesa “the munchies”. El deseo de comer es especialmente importante para los pacientes que sufren de náuseas o falta de apetito durante los tratamientos de quimioterapia, HIV/SIDA y otros procedimientos.

Esta sativa autóctona mejicana, grande y robusta, fue cultivada en 1978. (MF)

Las variedades mejicanas, colombianas, tailandesas y jamaicanas pueden resaltar por su potencia gracias a una proporción elevada de THC en relación al CBD, lo cual produce un efecto “acelerado”, energético y elevador. Pero la potencia puede ser mínima también, con niveles bajos de THC. La mayor parte del cannabis que se exporta desde Colombia, Méjico, Tailandia y Jamaica recibe un trato pobre a lo largo de su vida, y aún peor durante el secado y embalaje. Estos abusos causan una degradación más rápida del THC. Como consecuencia, las semillas que se encuentran en una marihuana aceptable suele dar lugar a plantas más potentes que sus progenitoras.

Las variedades de C. sativa que se cultivan en interior han sido cruzadas con C. indica para reducir su altura y su tiempo de floración. Los híbridos sativa-indica normalmente tardan un poco más en florecer que el C. indica puro.

Cannabis indica

El Cannabis indica (= C. sativa var. indica) fue clasificado como tal por el botánico europeo Jean-Baptiste de Lamarck en 1785 a partir de muestras que este estudioso consideraba procedentes de la India. Hoy en día, los investigadores están bastante de acuerdo en que el Cannabis indica L. se originó en el subcontinente asiático o, quizá, en la zona que ocupa Afganistán actualmente.

El C. indica es popular entre los criadores y los cultivadores de interior, exterior e invernadero debido a su crecimiento achaparrado y arbustivo; a su sistema condensado de raíces, sus tallos robustos y sus hojas amplias con foliolos anchos; y también por sus flores densas y pesadas, gruesas y cargadas de THC. Las plantas indica suelen alcanzar una altura máxima inferior a 2 metros, y producen más ramas laterales que las plantas sativa. El follaje típico es de un verde muy oscuro y, en algunas variedades, las hojas que rodean los cogollos se vuelven de color entre rojizo y morado. Los estigmas, cortos y blanquecinos, también pueden adquirir estas tonalidades rojizas y moradas bajo la luz del sol. La formación de flores se inicia alrededor de los nudos de las ramas, donde se desarrollan racimos apretados de cogollos. El peso en seco de la flor es típicamente mucho mayor en las variedades indica que en las sativa.

Indica ‘Strawberry Cough’, de Next Generation Seeds.

‘Pink Afghani’ × ‘African #3’ fue un híbrido temprano desarrollado por Mel Frank, 1982. (MF)

‘Afghani #1’ original de 1981. (MF)

Las variedades de C. indica contienen, en general, una proporción mayor de CBD por THC, y suelen contener más CBN que el C. sativa. Las plantas indica tienden a producir efectos más corporales, los cuales se describen con frecuencia como más físicos, relajantes e incluso incapacitadores. También pueden darse efectos secundarios como boca seca.

Algunas variedades indica tienen un distintivo olor, parecido al de las mofetas o a la orina de gato, mientras que otras huelen dulces y exóticas. Las plantas con una abundante carga de resina tienden a ser las más resistentes a diversos hongos y plagas. Pocas plantas indica con cogollos compactos, densos y pesados son resistentes al moho gris.

El Cannabis afghanica (= C. sativa var. afghanica) podría clasificarse como una subespecie del C. indica. Se originó cerca de lo que hoy es Afganistán. Es bastante bajo -raramente se acerca a los dos metros de altura-, y tiene hojas y foliolos distintivos, anchos y de color verde oscuro. Un enramado denso y entrenudos cortos, normalmente con rabillos de las hojas (peciolos) largos, dominan el perfil del C. afghanica. Los ejemplos más comunes de C. afghanica puro incluyen las diversas plantas de hachís existentes y las variedades afganas. El C. Afghanica se cultiva exclusivamente para obtener fármacos, convirtiéndose gran parte de la resina en un hachís que es conocido por su alto contenido en cannabinoides. Muchos cultivadores y criadores no distinguen el C. afghanica del C. indica, y agrupan ambos tipos en la categoría del C. indica. La variedad ‘Hash Plant”, de la cual existen muchos ejemplos distintos, es una de las expresiones clásicas del C. afghanica.

‘BC Kush’, de Next Generation Seeds, muestra un típico crecimiento bajo y achaparrado.

Cannabis ruderalis

Cannabis ruderalis (= C. sativa var. ruderalis) (= C. sativa var. spontanea). Los botánicos no se ponen de acuerdo en clasificar el C. ruderalis como especie o como subespecie. En 1924, el botánico ruso D. E. Janichevsky propuso la hipótesis de que el C. ruderalis hallado en Rusia central era C. sativa o una especie aparte, C. sativa L. var. ruderalis Janish. En 1929, Nikolái Ivánovich Vavílov, un reconocido botánico explorador, designó las poblaciones silvestres de cannabis en Afganistán como C. indica Lam. var. kafiristanica Vav., y las poblaciones silvestres encontradas en Europa como C. sativa L. var. spontanea Vav.

Por lo general, se cree que las variedades ruderalis tienen ancestros indica que se aclimataron a condiciones meteorológicas más duras. El C. ruderalis es muy bajo, de 30 a 75 cm al ser cosechado, y tiene un patrón de crecimiento asilvestrado y tipo matorral. El enramado es escaso y las hojas tienen foliolos anchos, similares a los del C. indica pero de un verde más claro en muchos casos. Los tallos son gruesos y resistentes. Las flores son pequeñas y moderadamente densas. El sistema de raíces es adecuado para plantas de poco tamaño. 

Plántula de ‘Lowryder’ original.

Una de las primeras puntas florales de ‘Lowryder’.

El siguiente paso en el desarrollo de la variedad fue llamado ‘Lowryder #2’.

El C. ruderalis representa un caso único en el cannabis, ya que florece según el estado de madurez, normalmente después de que aparezcan entre cinco y siete pares de entrenudos. Los cruces de C. ruderalis que están disponibles hoy en día suelen florecer en un plazo de 21 a 30 días desde la plantación de las semillas. Las plantas maduras están listas para ser cosechadas entre 70 y 110 días con independencia del fotoperiodo. El C. ruderalis florece y se reproduce en función de la edad de cada planta, sin importar el fotoperiodo.

El término ruderalis proviene de ruderal. En el reino vegetal, ruderal significa “primeras especies que colonizan tierras alteradas por el ser humano o por sucesos naturales”. El C. ruderalis es nativo de Asia, Europa central y Rusia, y está aclimatado a los entornos duros que se dan en estos climas. Su adaptación le permite desarrollarse en climas norteños extremos con temporadas cortas de cultivo, de sólo 3 meses.  

Las variedades de C. ruderalis están cruzadas con variedades de C. sativa y C. indica para incorporar los genes neutros a la luz del día. Los criadores están hibridando plantas con los genes de autofloración del C. ruderalis y que incorporan las cualidades del C. sativa y el C. indica: estatura de crecimiento robusto, flores de buen tamaño y un perfil de cannabinoides deseable. Véase “Cannabis feminizado autofloreciente”.

Cannabis feminizado

‘Jorge’s Diamonds’, de Dutch Passion es una variedad feminizada popular. Las semillas de esta variedad sólo están disponibles en versión feminizada. Consulta el capítulo 25, Crianza, para más información acerca de la feminización de las plantas.

‘Black Jack’, de Sweet Seeds, es una variedad nueva; una de las muchas variedades feminizadas que se presentan cada año en Europa.

‘Kalashnikova’, de Royal Queen Seeds, es otro ejemplo de variedad europea reciente.

Esta ‘Lowryder’ hembra acaba de empezar a florecer.

La variedad feminizada autofloreciente ‘Magnum’ puede encontrarse en la empresa española Hemp Trading (www.hemptrading.com).

‘EZ Ryder’ es otra variedad autofloreciente desarrollada por Joint Doctor.

Cannabis feminizado autofloreciente

Las plantas autoflorecientes de cannabis feminizado fueron popularizadas originalmente por el Doctor Joint, un veterano cultivador y criador de cannabis. Estas variedades tienen casi todas las características de las variedades normales de cannabis, pero florecen de forma automática. Los genes de la autofloración pueden ser incorporados a plantas sensibles a la luz del día, que florecen con un fotoperiodo 12/12 de día/noche, para que florezcan después de 3 o 4 semanas de crecimiento.

Las variedades con predominancia indica son muy populares porque florecen pronto por naturaleza, y el rasgo es fácil de seleccionar. Las plantas autoflorecientes con predominancia sativa suelen llamarse semiautoflorecientes o superautos, ya que empiezan a florecer tras crecer durante un periodo de 28 a 32 días. Estas plantas pueden superar 1,5 metros de altura. Al ser cosechadas (entre 90 y 110 días después de la plantación), las superautos pueden rendir más de 100 gramos de cogollo floral seco. Los días extra de crecimiento se traducen en un rendimiento más alto. Las plantas originales y más pequeñas de semilla autofloreciente florecen a los 21 días, maduran los cogollos entre 55 y 85 días, y producen poco más de 50 gramos como máximo. 

El cannabis autofloreciente es perfecto para climas frescos o fríos con temporadas de cultivo cortas. Las semillas autoflorecientes y superautos se desarrollan sin dificultad en climas norteños y alpinos, que tienen veranos cortos con días muy largos y noches cortas. Las plantas pueden ser cultivadas en interior al principio, y ser trasladadas al aire libre tras 3 semanas de crecimiento. Además de estar adaptadas al frío, las plantas autoflorecientes también son bastante resistentes a las enfermedades y las plagas.

En climas cálidos, los jardineros pueden cosechar 3 cultivos o más de cannabis autofloreciente al aire libre.  Las plantas superautoflorecientes tienen predominancia sativa, y se hacen más grandes que las plantas autoflorecientes originales, alcanzando entre 2 y 2,5 metros si se dan las condiciones adecuadas.

Las superautos comparten las demás cualidades de las plantas autoflorecientes: florecen con cualquier régimen lumínico, y también pueden ser feminizadas. Las superautos se diferencian en que crecen hasta 30 días antes de iniciar la floración. Las plantas se hacen más grandes durante una fase más larga de crecimiento vegetativo. Las plantas de mayor tamaño tienen más ramas y más follaje, y producen más cogollos florales. Cada planta superauto puede rendir entre 100 y 250 gramos de cogollo floral seco si se cultiva al aire libre con las condiciones apropiadas. Planta las superautos en primavera y verano. Cosecha entre 90 y 100 días después de que las semillas hayan brotado de la tierra.

Stitch, un criador francés, empezó a desarrollar superautos con genéticas mejicanas y guatemaltecas a finales de la década de 1990, y sigue desarrollando más variedades en la actualidad. Busca la superauto ‘Chaze’ y otras variedades suyas.

Cruces Indica / Sativa

Muchas variedades son el resultado de sólo dos variedades originales: ‘Skunk #1’ y ‘Haze’. ‘Skunk #1’ es una planta fabulosa. Fue la primera variedad estable de cannabis. Estas dos plantas son la base de la crianza de cannabis moderna.

‘Power Plant’, de Dutch Passion.

‘Sensi Star’, de Paradise Seeds.

‘Skunk #1’ en el pico de producción de resina.

‘Cannatonic’, de Resin Seeds, es rica en CBD.

La variedad alta en CBD ‘Harlequin’, de SoHum Seeds.

Variedades altas en CBD

En 2012, una de cada 500 muestras analizadas en los laboratorios californianos de pruebas para cannabis tenía niveles altos de CBD. El cannabis puede criarse de manera selectiva para que alcance niveles altos de CBD. Varios criadores han abierto el camino, como Jaime, de Resin Seeds (España) y Lawrence Ringo, de SoHum Seeds (Southern Humboldt Seed Collective, California). Otros criadores les siguen el rastro y están desarrollando variedades altas en CBD en estos momentos.

Variedades altas en THC

Existen muchas variedades altas en THC disponibles hoy en día para los cultivadores de cannabis médico. De hecho, la mayoría de variedades están cargadas de cannabinoides ricos en THC, y pueden cultivarse bien en interior, al aire libre o en un invernadero.

‘Haze’ es mi variedad favorita desde 1983, cuando Nevil, fundador del Seed Ban en los Países Bajos, me dio una gran rama para mi viajes de vuelta a Ámsterdam desde el Cannabis Castle. Sin duda, es mi variedad favorita de todos los tiempos. Esta opinión es compartida por incontables aficionados al cannabis. La ‘Haze’ original fue desarrollada por los Haze Brothers a principios de la década de 1970 en California central, y su crianza consistió en un cruce de híbridos colombianos y mejicanos durante el primer año. El segundo año, se cruzó una planta macho del sur de la India con la mejor descendencia hembra colombiana/mejicana. El tercer año, las mejores plantas hembra fueron cruzadas con una planta macho procedente de Tailandia. Hoy en día existen muchas versiones de “Original Haze”. La ‘Haze’ de Nevil es una de las más fuertes que he visto.

‘Arjan’s Haze’ (The Greenhouse) es una de las muchas variedades con base ‘Haze’ que están disponibles actualmente.

La presencia de ‘Haze’ en las variedades de cannabis actuales se estima de manera aproximada entre el 10 y el 15%.

La variedad ‘Haze’ suele cruzarse con otras variedades que maduran mucho más deprisa. Algunos de los cruces favoritos son: ‘Buddha’ (Dutch Passion), ‘Fuma con Diablos’ (Flying Dutchmen), y ‘Northern Lights #5’ × ‘Haze’ (Sensi Seeds). Por supuesto, también hay muchas variedades de “Original Haze”.

Sabor— dulce y especiado distintivo, pino alimonado 
Efecto—claro, de subida, vivaz, animado
Potencia—unas variedades más potentes que otras 
Genotiposativa colombiana, mejicana, tailandesa y del sur de la India
Cultivo—difícil, de maduración lenta, muy tendente a la sobrefertilización 
Olor—una vez que la huelas, recordarás para siempre su fragancia distintiva 
Aspecto—largo y espigado con cogollos ligeros
Rendimiento—bajo 
Resistencia a plagas/enfermedades—muy resistente a plagas y enfermedades 
Interior—tres meses o más 
Exterior—cosecha desde finales de diciembre hasta febrero 
Facilidad de manicura—baja Calidad/cantidad de hachís al agua a partir de recortes—buena

‘Skunk #1’ es el clásico por antonomasia. A día de hoy, casi la mitad de las semillas cultivadas en Holanda y las variedades canadienses tienen una parte de genes de ‘Skunk #1’. ‘Skunk #1’ fue desarrollada en 1978 por Sacred Seeds, con base en California. Esta única variedad transformó la crianza de cannabis en los Países Bajos y el resto del mundo. Ha sido la ganadora de numerosos festivales de la cosecha, incluyendo la Cannabis Cup de Ámsterdam. No puedes equivocarte al elegir esta variedad. Sensi Seeds registró el nombre, pero puedes encontrar la variedad en gran cantidad de bancos de semillas, y hay un poco de ‘skunk’ en incontables variedades. La larga historia de ‘Skunk #1’ (y de la mayoría de sus derivaciones directas) han hecho que sea una de las variedades menos caras que hay disponibles.

‘Original Skunk #1’ fue desarrollada por Sacred Seeds. (MF)

Es probable que ‘Skunk #1’ forme parte de la genética del 30% de las variedades que están disponibles en la actualidad.

Sabor—dulce y rancio 
Efecto—subida cerebral 
Potencia—fuerte pero permite funcionar, CBD bajo
Genotiposativa ‘colombiana’ / indica ‘afgana’ × sativa mejicana ‘Acapulco Gold’ 
Cultivo—fácil de cultivar pero sensible a la sobrefertilización 
Olor—distintivo, dulce y rancio, fuerte pero no arrollador 
Aspecto—proporción alta de flores por hoja; colas florales largas y gruesas; tendencia a entrenudos largos 
Rendimiento—muy alto
Resistencia a plagas/enfermedades—susceptible al moho durante la floración 
Interior—entre 50 y 70 días; hay muchas variedades disponibles de floración temprana
Exterior—mediados de octubre, excelente cultivo en invernadero 
Facilidad de manicura—muy fácil Calidad/cantidad de hachís al agua a partir de recortes—buena

‘Northern Lights’ (‘NL’) fue desarrollada por “The Indian” en una isla del noroeste del Pacífico. Empezó con 11 semillas, y las llamó ‘NL #1’, ‘NL #2’, etc. De todas las plantas, las mejores eran, por este orden, ‘NL #5,’ ‘NL #8’ y ‘NL #1’. Nevil envió clones a Ámsterdam desde Seattle, Washington, a mediados de la década de 1980. Hoy en día, ‘NL #5’ es la principal variedad de ‘NL’ que utilizan los criadores. ‘Northern Lights #5’ suele estar cruzada con otras variedades, como ‘Blueberry’, ‘Haze’, ‘Juicy Fruit’ y ‘Jack Herer’. Estas variedades están disponibles en Sensi Seeds (que tiene registrado el nombre Northern Lights), Canadian Professionals y Nirvana.  

‘Northern Lights’ fue una de las plantas originales de crianza fuerte.

‘Northern Lights #5’ es una opción obligada si cultivas en interior. Esta planta potente y de cultivo sencillo también es muy popular entre los cultivadores comerciales.

Sabor—fuerte, robusto, dulce, a pino y hachís 
Efecto—embriaguez corporal, inmobilizadora 
Potencia—muy fuerte, estupenda producción de resina 
Genotipo—predominancia de indica afgana y sativa tailandesa, muy estable 
Cultivo—fácil de cultivar, puede forzarse con fertilizantes 
Olor—aroma dulce a pino  
Aspecto—proporción alta de flores por hoja, cogollos compactos, tonos morados en las hojas a medida que madura la planta
Rendimiento—muy bueno, una favorita entre los cultivadores comerciales 
Resistencia a plagas/enfermedades—algo resistente a los trips y los ácaros, mejor si se cruza con una sativa Interior—entre 60 y 65 días 
Exterior—principios de octubre 
Facilidad de manicura—fácil y rápida 
Calidad/cantidad de hachís al agua a partir de recortes—buena pero poco volumen

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